Algo que ni Bonds, ni Babe Ruth, ni Alex Rodríguez, ni Mike Trout pudieron o han podido hacer.
Tras una sensacional segunda mitad en el 2018 y una fantástica primera mitad en 2019, ¿qué sigue para Christian Yelich? Una hazaña jamás vista en Grandes Ligas parece asomarse en el horizonte.
Cuarenta jugadores a lo largo de la historia de Grandes Ligas han logrado conectar 30 jonrones y robarse 30 bases en una campaña, en una satisfactoria combinación simétrica de poder y velocidad. Sólo cuatro de esos jugadores han logrado la hazaña 40-40 — Barry Bonds, el cubano José Canseco, Alex Rodríguez y el dominicano Alfonso Soriano.
Pero nadie ha podido lograr una combinación que es menos uniforme, pero no menos impresionante: 50-30.
Yelich podría cambiar eso. Antes de iniciar el Juego de Estrellas como titular de la Liga Nacional el martes en Cleveland, el cañonero zurdo había disparado 31 vuelacercas y se encontraba empatado en el cuarto lugar con 19 bases robadas en los primeros 91 juegos de los Cerveceros. Se trata del único jugador en la historia en acumular 30 cuadrangulares y estafarse 15 almohadillas en la primera mitad.
Cabe destacar que Yelich se ha perdido nueve juegos en lo que va de la actual temporada debido a problemas en la espalda. Tomando en cuenta sus números al llegar a la pausa del Juego de Estrellas, Yelich lleva paso de conectar 55 bambinazos y robarse 34 bases en 162 encuentros – una exhibición jamás vista de fuerza y velocidad.
Raramente, en el béisbol, este tipo de suposiciones llega a hacerse realidad. Pero, ¿quién puede dudar de Yelich a estas alturas de la temporada?
Enviado de Miami a Milwaukee previo a la campaña del 2018, Yelich llegó como un jugador que había mostrado un valor considerable — promediando 4.3 de WAR, según Baseball Reference, del 2014 al 2017 – pero que no había producido la clase de números que suelen asombrar. Durante su paso con los Marlins, las marcas personales de Yelich en jonrones y bases robadas eran ambas de 21, aunque no fueron logradas en una misma temporada.
Previo a la pausa del Juego de Estrellas en el 2018, Yelich parecía el mismo de siempre con OPS de .823 y 11 jonrones. Desde entonces, el toletero zurdo ha lucido implacable en la caja de bateo, dándole con autoridad a la bola con mucho más frecuencia. El patrullero de 27 años de edad tuvo una línea de bateo de .367/.449/.770 con 25 batazos de vuelta entera después de la pausa del Juego de Estrellas el año pasado, y hasta ahora está demostrando que esos números no fueron una casualidad con una línea ofensiva de .329/.433/.707 y 31 bambinazos.
El siguiente dato nos da una idea más clara de las probabilidades que tiene Yelich de convertirse en el primer hombre 50-30: En sus últimos 156 juegos desde el 8 de julio, se ha volado la barda 56 veces y ha estafado 31 bases (Si Yelich ve acción en cada uno de los partidos que le restan a Milwaukee, terminará jugando en 153 encuentros este año).
Por supuesto, Yelich no es el primer ligamayorista que intenta llegar a los 50-30. Nueve jugadores han conectado 40 jonrones y se han estafado 30 bases, y cuatro de ellos han alcanzado los 20 robos mientras que se han volado la cerca al menos 50 veces en una temporada. Echémosles un vistazo:
Más HR en una temporada de 30 bases robadas:
1) Larry Walker (1997, Rockies): 49 HR, 33 robos
2) Alfonso Soriano (2006, Nacionales): 46 HR, 41 robos
3) Hank Aaron (1963, Bravos): 44 HR, 31 robos
4) Jeff Bagwell (1997, Astros): 43 HR, 31 robos
5) Jeff Bagwell (1999, Astros): 42 HR, 30 robos
Walker fue el JMV de la Liga Nacional en 1997, cuando disparó 29 de sus 49 cuadrangulares fuera del Coors Field. Un cierre flojo –dos HR en sus últimos 16 juegos- evitó que el dominicano Soriano tuviera una temporada de 50-40. Aaron se estafó 30 bases una sola vez en su carrera y la emparejó con una de sus ocho campañas con por los menos 40 estacazos. Bagwell es el único primera base en la historia en llegar a la marca de 30-30.
Más robos en una temporada de 50-HR
1-Empate) Alex Rodríguez (2007, Yankees): 54 HR, 24 robos
1-Empate) Willie Mays (1955, Gigantes): 51 HR, 24 robos
3) Brady Anderson (1996, Orioles): 50 HR, 21 robos
4) Ken Griffey Jr. (1998, Marineros): 56 HR, 20 robos
En conclusión, conectar 50 jonrones y estafarse 30 bases son dos hazañas casi imposibles de combinar en una sola temporada en la Gran Carpa. Aun si Yelich se mantiene en salud y jugando todos los días, siempre existe la posibilidad de caer en un bache en cualquiera de las dos categorías. Y también vale la pena considerar que las predicciones de los dos sistemas de proyección más prominentes de FanGraphs — ZiPS (47 HR, 29 robos) y Steamer (46 HR, 28 robos) – ven a Yelich quedarse corto.
Por otra parte, la búsqueda de esta hazaña habría lucido imposible hace un año. Yelich es un jugador diferente ahora y pronto podría convertirse en un pelotero único de su especie.
Crédito | MLB.com