Por fin. Tras cinco aplazamientos y un gran número de rumores alrededor de las negociaciones que mantenían NBA y Sindicato de Jugadores (NBPA), ambos han emitido un comunicado oficial conjunto en el que certifican que han llegado a un acuerdo, detallando igualmente los puntos más importantes del mismo.
A estas alturas conocíamos ya que el draft se celebraría el 18 de noviembre, que los training camps empezarían el 1 de diciembre y que la temporada 2020-21 viviría su jornada de apertura el 22 de diciembre. Pero de igual modo quedaban por resolver dos puntos muy importantes que iban de la mano: el límite salarial con el que contarían los equipos y cuándo se abriría la agencia libre. Ambos han quedado resueltos.
Tras lo que han sido unas arduas negociaciones para modificar un convenio colectivo que, tal y como dijo Adam Silver, no estaba preparado para hacer frente a una pandemia, NBA y jugadores han determinado que la agencia libre se abra el 20 de noviembre; es decir, dos días después del draft, mientras que no se podrá firmar jugadores hasta pasados otros dos días; sí, hablamos ya del 22 de noviembre.
Respecto al aspecto más financiero de la negociación, el tope salarial queda fijado en 109,1 millones de dólares y el límite de impuesto de lujo en 132,5 millones. Tal y como se esperaba, se ha optado por mantener las cifras del curso pasado pese al golpe económico que ha supuesto la pandemia. Con tal decisión se cumple con el deseo de jugadores y equipos, quienes preferían evitar una caída del límite frente al desconocimiento de ingresos para el curso venidero. Además, de igual modo se ha garantizado que el tope salarial aumentará un mínimo del 3% por año y un máximo del 10%, algo que ocurrirá mientras dure el actual convenio colectivo (hasta 2024).
Depósito de garantía
Vamos ahora con el famoso escrow (porcentaje que se retiene cada año del salario de los jugadores). Este ha sido uno de los puntos candentes de la negociación. La NBA entendía que los jugadores debían dar más del 10% habitual y estos no parecían estar por la labor. Finalmente se ha llegado a un entendimiento para que sean los propios ingresos de la temporada los que marquen si hay que aumentar el porcentaje o no.
En principio, y tal como dicta el acuerdo alcanzado, se mantendrá la habitual retención del 10%, la cual se verá aumentada si existiese necesidad de ello. En ese supuesto, la retención a los jugadores se extendería durante la temporada vigente y dos más. Además, en ningún caso se superaría el 20% de retención de los salarios en una sola temporada. En todo caso, la esperanza de ambas partes es que se pueda regresar a una base financiera normal más pronto que tarde.
‘Descuento’ en el impuesto de lujo
Tratando de promover los movimientos en el mercado, la NBA ha decidido reducir la factura de impuesto de lujo para los equipos que incurran en él al final de la temporada 2020-21. El ‘descuento’ será directamente proporcional al porcentaje que disminuyan los ingresos respecto a lo proyectado inicialmente. Más claro: si la caída en los ingresos es de un 20%, ese será el porcentaje que se aplique de igual modo a la factura de las franquicias. Si Golden State debe pagar por ejemplo 60 millones de dólares, un 20% les dejaría en 48 millones de dólares (ahorrarían 12).
Mercado de traspasos
He aquí la única duda que mantenemos de cara a la temporada que ya se nos echa encima (queda mes y medio). Por ahora no se ha fijado una fecha para que los equipos puedan empezar a realizar traspasos. Con el draft celebrándose en ocho días, está claro que la NBA deberá levantar en breve la moratoria sobre intercambios para que los equipos pueden empezar a moverse. Según ESPN, será poco antes del draft cuando se abra definitivamente el mercado de traspasos. Cuestión de pocos días.
Una vez la Liga dé luz verde viviremos unas semanas frenéticas. Traspasos, draft y agencia libre tendrán lugar en menos de dos semanas antes de que empiecen los training camps el 1 de diciembre. Serán días vertiginosos en los que los equipos querrán tener prácticamente cerradas sus plantillas. Las medidas tomadas por la NBA respecto al límite salarial y el impuesto de lujo deberían animar a que los equipos se muevan en el mercado sin precauciones excesivas. Para sonrisa de todos, esto está a punto de ponerse en marcha.