Cuando los Astros de Houston, recién coronados campeones de la Serie Mundial del 2022, se reunieron jubilosamente en la tarima, el Trofeo del Comisionado rápidamente llegó a manos de Michael Brantley. Sus compañeros de equipo se aseguraron de que así fuera.
Las sonrisas alrededor de Brantley contaban la historia: Después de 1,430 juegos de Grandes Ligas, se había ganado su anillo de Serie Mundial.
Brantley no había visto acción después del 26 de junio de esa temporada luego de ser operado del hombro derecho por cuarta ocasión, pero sus compañeros de equipo querían que estuviera en medio de la celebración.
“Ésa fue la parte más especial para mí”, recordó Brantley el jueves en una entrevista telefónica con MLB.com. “Mis compañeros de equipo poniéndome en el medio, diciéndome que alzara el trofeo. Todavía se me eriza la piel pensando en eso. Siempre lo voy a recordar».
Ahora, Brantley llega al retiro después de una carrera destacada en la que bateó .298 en 10 campañas con Cleveland y cinco con Houston. El guardabosque empalmó 129 cuadrangulares y remolcó 720 carreras en esas 15 temporadas, en las que fue convocado a cinco Juegos de Estrellas .
“Tengo hijos pequeños y ahora es hora de ser padre, antes que nada”, dijo Brantley.
Jon Paul Morosi/MLB.com