Se llevaba mascando unos cuantos días y, hace tan solo unos minutos, acaba de cerrarse la llegada de Monty Williams al banquillo de los Suns. El acuerdo es por los próximos cinco años, tal y como ha confirmado Adrian Wojnarowski, de ESPN.
La franquicia de Phoenix andaba a la búsqueda y captura de un entrenador jefe para hacerse cargo del equipo tras la destitución de Igor Kokoshov el mes pasado. La decepcionante temporada que vivieron los Suns, de quienes se esperaba un mejor desempeño y desarrollo de su núcleo joven, precipitó la salida de Kokoshov. El equipo finalizó el curso con el segundo peor balance de la NBA (19-63), empatado en ese deshonroso puesto con los Cavaliers. El primer lugar de este ranking cayó en manos de los Knicks, con un paupérrimo 17-65.
Williams estaba ahora ejerciendo como técnico asistente de Brett Brown en los 76ers, quienes están en plena disputa de playoffs ante los Raptors. Antes de esta etapa, Williams ya sabía lo que era ser el máximo responsable de un vestuario, tras dirigir a los Pelicans durante cinco campañas. De esa época guarda una gran relación con Anthony Davis, a quien pudo entrenar varios años.
La llegada de Williams a los Suns supone todo un hito para la organización: es el séptimo entrenador en los últimos ocho años. Antes de Kokoshov, pasaron por el banquillo nombres como Earl Watson, Jay Triano, Jeff Hornacek, Alvin Gentry y Lindsey Hunter.
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