Actualmente hay un pleito muy feo entre la Federación Dominicana de Atletismo, que preside Gerardo Suero Correa y el entrenador Ludwig Rubio, que tiene nueve atletas de la selección nacional, incluyendo a la segunda mejor corredora del país, Fiordaliza Cofil.
Ayer escribimos brevemente sobre eso y cómo veíamos que Cofil está equivocada al amenazar con no asistir a los Juegos Centroamericanos y del Caribe, que comienzan en una semana, si Rubio se quedaba fuera del equipo de entrenadores, como la Federación de Atletismo y el propio Correa han manifestado.
Los problemas personales entre Correa y Rubio no deben estar por encima de las aspiraciones de la República Dominicana en este o cualquier otro evento internacional.
El tema está siendo mal manejado por ambas partes y urge que tanto el Comité Olímpico Dominicano como el programa Creando Sueños Olímpicos intervengan lo más pronto posible para resolver este pleito que luce más un chisme que una situación real.
No veo bien que ningún atleta le pase factura al país, mucho menos cuando éstos son protegidos desde su comienzo por diversos programas de asistencia, incluyendo el anteriormente conocido como PARNI y otras instituciones.
Pero ningún federado debe maltratar a ningún atleta, sin importar su nivel.
Luego de los éxitos del atletismo dominicano en Tokio 2020, no es justo que rencillas sin sentido afecten el crecimiento que se ha logrado.
Ambas partes deben entender, que el país debería estar por encima de los intereses particulares.