El descalabro de los Medias Rojas de Boston, eliminados apenas un año después de haber sido campeones de la Serie Mundial, lleva a varios análisis.
Y uno de ellos es sobre los cambios que debe hacer el equipo pensando en la próxima temporada.
A pesar de los rumores que pesan sobre las dudas en la continuidad de Alex Cora como manager del equipo, es una de las cosas que debe permanecer sin cambios es el cuerpo técnico.
Y la prioridad para los nuevos encargados de la gerencia será reconstruir el cuerpo de pitcheo. Duramente criticados por no reforzar su plantilla de lanzadores, fue este aspecto el que terminó pasándoles factura.
La ofensiva no resultó un problema y no hay razones para pensar que lo será, pero los Medias Rojas deben hacer movimientos que garanticen la llegada de mejores serpentineros. Todo el bullpen debe ser blindado, pero principalmente necesitan un cerrador de cartel.
Y también los abridores pueden estar en la mira de los cambios. Los veteranos Chris Sale y David Price tuvieron temporadas para el olvido, sucumbieron a las lesiones y todavía están atados a la organización por varias temporadas con contratos millonarios.
Para lograr el objetivo de volver a ser competitivos tendrán que sacrificar a algunas de sus fichas en las granjas, que no son demasiado sólidas. Una organización como esta no puede darse el lujo de perder tiempo, los cambios deben hacerse rápido.
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