El puertorriqueño Alex Cora, manager de los Medias Rojas, reconoció el lunes que un bajón antes del 31 de julio, la fecha límite para hacer cambios, podría convencer a la directiva del club a vender en vez de sumar piezas. Los Patirrojos están en el medio de una seguidilla de 14 juegos en la que jugarán sólo ante los Rays y Yankees.
Pero con victorias en los primeros dos duelos de la serie de tres en el Tropicana Field, Boston está empatado con Tampa Bay en el segundo lugar de la División Este de la Liga Americana y a sólo dos encuentros del segundo comodín de la Americana.
A estas alturas, pareciera poco probable que los campeones defensores vayan a vender. Y aun en el caso de que tomen ese camino, no son muchos los jugadores que pondrían en el mercado. Figuras como Mookie Betts, Xander Bogaerts, el dominicano Rafael Devers, Andrew Benintendi y Chris Sale no se irán a ninguna parte y es poco probable que otros equipos estén interesados en asumir los contratos de David Price (US$96 millones entre el 2020 y el 2022) y Nathan Eovaldi (US$51 millones entre el 2020 y el 2022).
Rick Porcello, quien será agente libre este invierno, y el jardinero central Jackie Bradley Jr. (bajo control contractual. hasta el 2020) son posibles fichas de cambio, pero ninguno ha tenido un buen año.
Y luego está el toletero J.D. Martínez, quien puede salirse de los últimos tres años de su contrato y dejar US$62.5 millones sobre la mesa tras esta campaña. El presidente del departamento de operaciones de béisbol de los Medias Rojas, Dave Dombrowski, ha indicado que no espera que el equipo negocie un nuevo acuerdo con Martínez.
Sin embargo, en una nota para The Athletic, Ken Rosenthal de MLB Network apuntó una serie de razones por las cuales es poco probable que Martínez sea cambiado.
Como dijo Rosenthal, no es seguro que Martínez vaya a salirse de su contrato, lo que podría evitar que los equipos de la Liga Nacional se interesaren por él. Martínez tendrá 35 años cuando termine su pacto actual, y un club de la Nacional se vería obligado a colocarlo en los jardines, debido a la falta del bateador designado.
Martínez encaja mejor en la Liga Americana, pero la mayoría de las novenas del Joven Circuito está buscando pitcheo, y aquellos que andan detrás de un bate — los Rays, Indios y Atléticos – son equipos de bajos ingresos que probablemente no vayan a asumir el riesgo de tener que pagarle a Martínez US$62.5 millones durante los próximos tres años.