Los Rojos de Cincinnati y los Piratas de Pittsburgh jugarán una serie durante el fin de semana, pero antes de que inicie ambos equipos saldrán al terreno con una advertencia de la MLB para sus lanzadores y demás jugadores del roster.
Tanto Escarlatas como Bucaneros protagonizaron la pelea más vergonzosa de la campaña, y quizás las cinco más impactantes en la historia de las Grandes Ligas. Es por ello que las autoridades tomaron medidas previas.
A solo unos días antes de que la serie de tres partidos se lleve a cabo, la liga advirtió sobre cualquier forma de represalia después de la pelea de julio.
Según Lance McAlister, de 700 WLW, los managers Clint Hurdle y David Bell recibirían sanciones en caso que se presenten situaciones que provoquen a sus rivales y se habla de algo que más allá del dinero.
Por la tángana anterior se reportaron 40 suspensiones. El lanzador de los Piratas, Keone Kela, recibió una suspensión de 10 juegos. Amir Garrett de los obtuvo una prohibición de ocho partidos. Bell, por su parte, fue castigado seis encuentros y Hurdle quedó al margen por dos compromisos.
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