Sandro Fabián firmó un contrato con el equipo Hiroshima Toyo Carp por US$5.8 millones por tres campañas y de inmediato le puso fin a su participación en la pelota invernal dominicana, donde jugaba para la organización de los Toros del Este.
Fabián, además, recibió incentivos extra por US$600 mil como parte del acuerdo.
¿Y qué pasa con los Toros del Este, organización con la que tenía un contrato para la temporada 2024-25?
Simple y llanamente se quedan con las manos en la cabeza sin ningún tipo de compensación por el abandono, contrario a lo que sucede en otras ligas, en las que esos acuerdos con ligas asiáticas no se concretizan hasta que dicha organización no paga un «buyout».
Pero, por alguna razón que desconozco, ni la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana ni los equipos que la conforman han querido aprovechar una propuesta que hizo la Federación Nacional de Peloteros Profesionales poco antes de firmar el pacto colectivo.
Recientemente, Audo Vicente me comentaba la posición de un gerente general de no afectar a un jugador, negándole un permiso para irse o exigiéndole una retribución. ¿Pero por qué no ponerle reglas a ligas como las de Corea del Sur, Taiwán o Japón?
En el pasado torneo, los Tigres del Licey sufrieron con la prohibición de jugadores como Mel Rojas en medio de la serie final, sin poder hacer absolutamente nada ni para impedirlo, mucho menos para recibir un pago que aliviara ese golpe.
Desde hace años se ha hablado de regular esas acciones sin que se haga nada para cambiar una realidad que año tras año golpea a todas las organizaciones de la pelota invernal.
¿Será que no les duele lo que sucede? Por lo visto no, ni tampoco les importa.
Breves
Esta semana comienzan las ofertas formales a Juan Soto para firmar en la agencia libre. Todo indica que la puja comienza con US$600 millones. Ya veremos qué pasa… El prospecto Ismael Ureña Pérez ya tiene cuatro meses muerto y todavía no hay ni siquiera una investigación pública abierta. Por lo visto hay muertos que no duelen… Las lluvias de los últimos días han complicado mucho el calendario de la pelota invernal, se vislumbran muchos doble juegos en el futuro inmediato.