El derecho dominicano Luis Severino ha estado muy, pero muy mal toda la temporada, con los Yanquis de Nueva York y el domingo parece haber tocado fondo en un 2023 en el que tiene una foja de 2-5 y 7.49 de efectividad en 12 aperturas.
En esas 12 salidas, el quisqueyano tiene un WHIP de 1.838 y al día de hoy presenta un valor negativo en el montículo, con un WAR de -1.5.
Este es el mismo lanzador que al comienzo de la campaña estaba cuestionando las decisiones del equipo médico, la gerencia y la dirigencia porque quería lanzar y sentía que lo estaban dejando rezagado en las menores, en un proceso de rehabilitación extendido de los problemas que ha tenido en su costado y en su brazo de lanzar.
El domingo, luego de haber sido castigado sin piedad por los Orioles de Baltimore, que le fabricaron nueve carreras en 3.1 entradas, en un partido de vital importancia contra un rival divisional, Severino tocó fondo.
«Ahora mismo me siento como el peor lanzador del juego», dijo Severino, de acuerdo a declaraciones publicadas por Newsday.
«No tengo duda… nada de lo que hago está dando resultados».
Severino está lanzando en la última temporada de un contrato de cinco años que firmó previo a la campaña del 2019.
Pero el derecho solo ha realizado 38 aperturas para los Yanquis en ese tiempo, mientras sus ingresos han pasado de los US$50 millones y se perdió todo el 2020, mientras se recuperaba de una lesión de costado que lo dejó totalmente fuera de acción.
Al finalizar el 2023, Severino será agente libre por primera vez en su carrera y, por el momento, no hay claridad sobre lo que pasaría con el quisqueyano.
El dirigente Aaron Boone dijo ayer que no estaba definido si Severino haría su próxima apertura en la rotación de los Yanquis.
Domingo Germán se perdió su apertura de ayer debido a un golondrino en el sobaco derecho. En su lugar abrió su compatriota Jhony Brito… Se esperan movimientos incluyendo dominicanos previo a la fecha límite de este martes a las 6 p.m… Major League Baseball ha pagado su acuerdo de $185 millones de una demanda de jugadores de ligas menores que alegan violaciones de las leyes de salario mínimo.