Gracias a Francisco Lindor y pese a ser el sexto clasificado de la Liga Nacional, el equipo de los Mets de Nueva York se convirtió en el primero que consigue su boleto para la Serie de Campeonato, y tratará de llegar a su primera Serie Mundial en nueve años.
Luego de verse con marca de 22-33 a finales de mayo, el conjunto inició un improbable repunte, sobre todo al considerar que 2024 se veía como una temporada de plataforma en donde alcanzar los playoffs era una posibilidad lejana.
Una reunión convocada por el manager Carlos Mendoza luego del episodio protagonizado por Jorge López, la decisión de utilizar a Francisco Lindor como abridor en la alineación, la llegada de José Iglesias y la mejoría en la actuación de la rotación del conjunto fueron factores claves para el repunte de los Mets.
En esta etapa final, las contribuciones de Lindor han sido especialmente importantes. Basta recordar el cuadrangular que conectó el 11 de septiembre que rompió un no-hitter de Bowden Francis y le dio a los Mets una victoria clave contra Toronto.
Luego vino el dramático jonrón contra Atlanta para darle la clasificación a los Mets el 30 de septiembre. También la base por bolas que precedió el batazo de cuatro bases de Pete Alonso que le dio la victoria al conjunto en la serie de comodines contra Milwaukee.
Y ni hablar del “Grand Slam” del miércoles para enterrar a los Phillies de Philadelphia.
Si unimos la contribución ofensiva del boricua a su superba defensa, velocidad en las bases y liderazgo, hay que concluir que ha tenido una temporada de Jugador Más Valioso. Sabemos que no obtendrá el premio, pero ha sido esa clase de estación para el jugador de 30 años.
El conjunto de Flushing también ha tenido las importantes contribuciones con el bate de Alonso y Mark Vientos y ha contado con el mejor pitcheo abridor en la post-temporada. Mientras la tónica de la mayoría de los equipos en esta etapa ha sido el uso del bullpen tan temprano como sea posible, la combinación de Luis Severino, Sean Manea y José Quintana ha entregado entradas efectivas de manera consistente al dirigente Mendoza.
Al momento de clasificar, los Mets encabezaban ampliamente el departamento de innings lanzados por sus abridores con 37, exhibiendo un excelente PCL de 2.43.
Por meses, el balance de este equipo ha sido altamente positivo. Ahora necesitan continuar ejecutando en el resto de la post-temporada.